Aunque desde este blog siempre animamos a emprender acciones valientes y creativas en el aprendizaje de idiomas, nunca está de más extremar la prudencia. Tengo que confesar en primera persona que a pesar de mi experiencia en la organización de viajes lingüísticos cometí el error de fiarme de una empresa que goza de cierta implantación, como "EF Education First", cuando actué como padre para contratar uno de estos viajes para mis hijos.
A pesar de haber gestionado programas Erasmus+ para profesores y para alumnos, de haber organizado estancias lingüísticas en distintos países e incluso de conocer qué escuelas prestan servicios de primera calidad para diferentes idiomas, cuando organicé un viaje para uno de mis hijos, un adolescente de 14 años, decidí confiar en una empresa especializada en estos cursos y con implantación en varios países en vez de gestionarlo directamente con los prestadores de servicios en destino como he hecho en otras ocasiones.
Teníamos en mente algo estándar pero ambicioso: un curso de 4 semanas a Irlanda. Éramos conscientes de que todavía podía ser joven para comenzar este tipo de actividades, por lo que nos decidimos por "EF Education First", que aunque no era ni mucho menos la más económica parecía seria. También nos dejamos aconsejar por la simpática comercial que nos atendió cuando nos aseguró que Malta era el destino mas apropiado para los “juniors”, los alumnos de este tramo de edad, con preferencia a Irlanda (nuestra primera opción); a lo que nos animamos reduciendo una semana el período inicial para hacer este reto un poco más liviano para nuestro hijo, y algo más económico para nosotros, ya que el presupuesto se nos disparaba respecto a lo inicialmente previsto.
Toda la familia empezamos esta experiencia muy ilusionados, y no le dimos importancia al primer contratiempo: cuando para solucionar un problema con los vuelos fue necesario adelantar un día el viaje, lo que conllevaba un sobreprecio de 100€. Al fin y al cabo, conozco las contingencias que a veces suceden en este tipo de viajes, y aunque este inconveniente probablemente debiera haber sido asumido por la empresa que ya nos había presupuestado y empezado a cobrar el viaje, no nos negamos a un cambio tan pequeño. Cuando inicias una aventura de este tipo debes contar de partida con pequeños inconvenientes e imprevistos: algún retraso, la comida de la cantina suele recibir quejas (un clásico en los viajes de idiomas), alguna anulación de actividad, e incluso algún pequeño desacuerdo con la familia (que no se produjo, la señora que acogió a nuestro hijo atenta e impecable).
Los verdaderos problemas llegaron cuando nuestro hijo llegó a destino, y se centraron en el transporte desde el domicilio de la familia con la que se alojaba al centro de estudio y las actividades. La casa de la familia se encontraba realmente cerca de la escuela, (en una ocasión que viajó directamente tardó 12 minutos en un UBER) pero los trayectos se prolongaban innecesariamente como mínimo a 55 minutos, y generalmente bastante más. En el mapa adjunto, reflejo el trayecto del autobús para llegar al punto final marcado, que realmente está próximo a la escuela pero al que se llega tras una enorme e inexplicable vuelta; ésto lo grabó mi hijo con una aplicación de google que le íba marcando la ubicación en tiempo real.Los primeros días optamos por quitarle importancia, pensando que era un error transitorio que la empresa se apresuraría en solucionar y le pedimos a nuestro hijo paciencia convencidos de que pronto arreglarían esta situación. Pero como al tercer día no fuera así optamos por informar a EF en España de estas irregularidades en el teléfono que nos habían dado para estas incidencias, convencidos de que se trataba de un mal servicio dado por los prestadores en destino en Malta, pero que en cuanto la agencia española tuviera noticia los corregiría. Como el tiempo pasaba, la situación empeoraba (lo del fin de semana fue verdaderamente dramático) y nuestro hijo sufría verdaderamente su estancia ante la pasividad de los encargados de dar el servicio en Malta y de la propia empresa EF (que reconocía los hechos y decía que se solucionarían sin resultado) insistimos por correo electrónico, donde también nos seguían dando largas sin solucionar nada.
Finalmente, en vez de solucionar esta situación nos
propusieron que cambiásemos a la residencia asumiendo un sobrecoste; y a pesar que mi opinión profesional es que siempre es mas productiva la estancia en familias que la residencia, esta
solución fue la que finalmente nos vimos obligados a adoptar los padres de creo que la totalidad (o casi) de los alumnos que estaban alojados en familias, que solicitamos el paso a la residencia ante la insostenible situación
de desamparo en la que se encontraban nuestros hijos.
Sirva de ejemplo los trayectos de 2 días que anoté
sistemáticamente para eventuales reclamaciones y que en su día le comuniqué a
EF sin que realmente hicieran nada para solucionarlo. La comunicación exacta se puede ver más abajo entre los correos que adjunto al final:
Viernes 7 de julio de 2023, a partir de las 19:00h.
Tras llevar ya dos horas de autobús más los tiempos de espera al autobús que siempre llega tarde, mi hijo tomó el autobús a las 19:00 (debía ser a las 18:00, ésta es la hora de inicio de la actividad correspondiente). Por algún motivo (el chofer se perdió, o no encontraba al grupo, o vete a saber qué...) siguieron en el autobús dando vueltas hasta las 21:13 horas, momento en el que ante las protestas de algunos estudiantes el autobús paró, una estudiante sufrió un ataque de ansiedad, otros se desplazaron andando hasta un sitio indeterminado solos y enfadados, para volver al autobús a las 21:40; de modo que el autobús los trasladó hasta otro lugar al que llegaron a las 21:54 desde el que accedieron a las inmediaciones de la discoteca donde se encontraban el resto de estudiantes a la que llegaron andando para encontrarse con está ya cerrando, y el resto de estudiantes (parece ser que los alojados en la residencia, que no sufren estos problemas de transporte) ya estaban saliendo y esperando otro autobús (sic) que los recogió a las 22:55 para tras hacer el resto de paradas dejar a mi hijo en la suya a las 00:16 . Como se puede observar, entre las 19:00 h y las 00:16, los estudiantes alojados en familia estuvieron más de 5 horas de tránsito en un autobús, a lo que hay que sumar las dos horas de la mañana, más los tiempos de espera por los continuos retrasos; no pudiendo en esta jornada realizar ninguna actividad y pasando momentos de enorme tensión.
Sábado 8 de julio 2023:
Mi hijo se levantó a las 06:30, tras haber dormido sólo unas 6 horas, para estar en la parada del autobús a las 7:45 (hora de la recogida) en la que como es habitual permaneció hasta que el bus llegó a 08:35; de modo que evidentemente no llegó a las 09:00 a la actividad programada, sino que llegó al instituto (el punto de encuentro) a las 09:37. El grupo del resto de estudiantes ya había salido, de modo que deambularon por las inmediaciones del instituto solos y sin orientación sobre qué hacer, motivo por el cual yo mismo llamé al teléfono de emergencias a las 09:50 para manifestarles esta situación, donde tras escucharme amablemente me indicaron que abrirían una incidencia pero que realmente no podrían solucionar nada durante el fin de semana. Poco después apareció una monitora y sobre las 10:00 un autobús que los trasladó con el resto del grupo que ya habían realizado la actividad prevista según calendario.
En definitiva, la sensación era como de un "castigo" a los alumnos alojados en familias (señalar que el alojamiento en familia era algo más barato que el de residencia) a los que se maltrataba con un transporte irracional y que se perdían las actividades, a las que se sumaban... Si llegaban. Tras pagar lo que nos pidieron para pasar a nuestro hijo (el penúltimo que quedaba de los 20 alojados en familia) a la residencia, pensamos que lo peor habría pasado y que nuestro hijo disfrutaría del viaje de idiomas durante las 2 semanas que quedaban. Aún así sucedieron otros incidentes, menores si lo comparamos con lo anterior, que enturbiaron este viaje; pero que desgraciadamente hay que atribuirlo a la rapacidad de los prestadores de servicios en destino que la empresa EF ha elegido:
- El primero es que en una actividad de buceo denominada "Blue Grotto" (ya incluida en uno de los “packs” que previamente le había contratado y pagado junto con el viaje) los encargados de trasladarlos en barcas al lugar de la actividad le exigieron un pago de añadido que él no pudo efectuar por no llevar esa cantidad de dinero en efectivo encima. El resultado es que se quedó en el puerto de esa localidad, desconocida para él, sólo (sin compañeros ni monitores) y por tanto desatendido durante el tiempo de desarrollo de la actividad (aprox. hora y media).
- Otra fue una desagradable situación que se dio cuando una noche al ir a acostarse, se encontró que el recepcionista del hotel-residencia le había bloqueado la apertura de la puerta de la habitación como medida de coacción para exigirle un pago de 20 € por supuestamente haber ensuciado las toallas que proporcionaba el hotel (sic); toallas que por cierto él no utilizó ya que llevaba las suyas. Este altercado se solucionó (esta vez sí) con la intervención de los monitores, reconociendo posteriormente el recepcionista que se trataba de un error; lo que no impidió que todas las noches siguientes hasta el final del curso se volviese a repetir el bloqueo de la habitación y la incómoda situación de tener que pedirle al conserje que te abra la habitación...
- El objetivo principal del viaje, que era familiarizar a nuestro hijo con este tipo de experiencias y motivarlo para que en el futuro emprenda otras similares más ambiciosas (otros viajes de estudio, Erasmus+, intercambios, etc...) no se ha logrado; más aún diríamos que el dolor y la ansiedad padecida empujan precisamente en la dirección contraria de rechazo a estas actividades.
- Respecto al objetivo secundario, de mejora del nivel de inglés, no me puedo pronunciar con criterio, el tiempo lo dirá. Sí hemos conseguido el objetivo secundario de incrementar la autonomía de nuestro hijo, ya que las experiencias sufridas lo han hecho imprescindible.
- Respecto a la imperdonable dejación e indiferencia de los prestadores de servicio locales (los transportistas, la residencia, los encargados de las barcas) da la sensación primero de una ineficacia total, sin interés por corregir los incumplimientos y fallos que en ocasiones me han hecho pensar que han sido interesados, para obtener mayores rendimientos, engañando y coaccionando a los estudiantes y sus familias. Las situaciones recuerdan aquellas películas antañonas de Pajares y Esteso, con todo mi respeto para ellos, que describían la situación de una España de hace 40 años en las que se estafar al turista nos hacía gracia.
- En cuanto a la inexcusable ineficacia de la empresa con la que hemos contratado el viaje de idiomas, "EF Education First" para corregir estos problemas conocidos por ella, me queda dudar si SE VE EXCEDIDA POR ELLOS y no puede actuar sobre los prestadores locales del servicio siendo incapaz de corregirlos, o simplemente una vez cobrado el precio del viaje LE ES INDIFERENTE Y no hace nada por solucionarlos, salvo en su caso tratar de "vender otro paquete". Y es una pena cualquiera de las dos posibilidades porque la primera habla de incompetencia, la segunda de dejadez; y cualquiera de las dos anula la credibilidad y garantía que, al menos para mí, gozaba hasta este momento.
En todo caso, y como tengo la intención de reclamar por diferentes vías (primero ante la empresa, posteriormente en consumo, y en su caso judicialmente) informaré a través de este blog de la evolución de este caso.
Finalmente, como fuente primaria de información, incluyo la
transcripción de algunos de los mensajes cruzados a lo largo de todo este
proceso, eliminando sólo las referencias reiteradas o innecesarias así como los datos personales de personas físicas:
Qué vergüenza... Lo estuve mirando para llevar a mi hija, pero visto lo visto da qué pensar... Gracias por compartir la info.
ResponderEliminarHola, que poca seriedad, me parece una falta de responsabilidad impresionante, está bien saber cómo funciona esta empresa y no cometer el error de mandan mis hijos con ellos. Para trabajar con menores hay que ser muy serio, y no veo que ellos lo sean. Gracias por informarnos
ResponderEliminarHola, que poca seriedad, me parece una falta de responsabilidad y una barbaridad, muchas gracias por compartir esta información y abrirnos los ojos, yo pensaba mandar mis hijos pero los mandaré por otra vía que no sean ellos.
ResponderEliminarQué impotencia habrán sufrido los padres y qué malos ratos todos los afectados!. No hay derecho!. Espero que haya una compensación y que EF pague por su nefasta organización.
ResponderEliminarEs una pena que un viaje de este tipo que debería ser una experiencia enriquecedora, llena de aprendizajes, sobretodo por estar fuera de casa y enfrentarse a nuevas situaciones, pero también del idioma acabe convirtiéndose en un viaje para olvidar.
ResponderEliminarEs para tenerlo en cuenta a la hora de organizar futuros viajes educativos. Tanto para familiares como para el alumnado.
Todos entendemos que a veces las cosas no salen como se planean y surgen imprevistos pero es imperdonable que no se pongan medios para solucionarlos.
Lo siento por tu hijo que haya tenido que pasar por esta situación. Ojalá se anime a volver a intentarlo y disfrutar todo lo que no ha podido hacerlo esta vez por culpa del desinterés de la empresa.
Un abrazo para todos,
Víctor
Buenas noches. Muchas gracias por tu comentario el mismo nos ayudará a padres que estábamos pensando en utilizar a esta empresa para llevar a nuestro hijo el próximo año a Malta para reforzar su inglés, se nos han quitado las ganas, es más imposible utilizarla en un futuro.
ResponderEliminarCompartiré tu comentario con otras madre.
Suerte con tus reclamaciones
Qué falta de profesionalidad! No os habrán quedado ganas de repetir, ni al chico ni a los padres
ResponderEliminarEstoy alucinando, no doy crédito a lo que he leído…¡Me parece demencial! Y toda una TOMADURA DE PELO. No quiero ni pensar en cómo lo habrá pasado tú niño. Bueno, todos esos niños.¡Pobrecitos!No creo que tengan muchas ganas de repetir.
ResponderEliminarEstaba barajando enviar a mis dos hijos con EF fuera el próximo año, pues tenía entendido que era seria, pero después de leer vuestra experiencia, ¡NO SE ME OCURRE! Es más, lo voy a comentar a otros padres antes de que sea demás tarde.
Mucha suerte con la reclamación, y gracias por abrirnos los ojos.
Muchas gracias a todos. En este momento estoy reclamando a la empresa que asuman el coste añadido de la residencia y una compensación por la primera semana no disfrutada. Seguiré informando de cómo evoluciona.
ResponderEliminarMucho ánimo!
EliminarMe parece inadmisible. Una experiencia que deberia dw haber sido tan gratificante para un adolescente ha pasado a ser algo traumático.
ResponderEliminarSe deberian cuidar mas estos programas que suponen un esfuerzo esconómico para las familias y pretender dar a sus hijos una educación mejor y nuevas experiencias.
Desde luego me quedo conel ombre de la empresa EDUCATON FIRST para NO tener ni guna rela ión con ella ni recomendsrla a nadie
Es muy fe agradecer que nos hayas informado de esta experienca tan nefasta. Resulta inadmisible que un esfuerzo económiconpara las familias que pretender dar una mejor educación a sus hijos acabe de esta forma, sin contar con el rechazo que pueda producir en un adolescente fuera de su hogar esta situación.
ResponderEliminarGracias por hacernos partícipes de que en esta empresa, EDUCATION FIRST, no se puede confiar ni recome dar a nadie
Me parece increíble que hoy en día se produzcan este tipo de situaciones. La empresa organizadora y las personas responsables creo que dejan mucho que desear.¡Una vergüenza!
ResponderEliminar¡Que poca vergüenza y seriedad! Creemos que ponemos en nuestras manos lo que más queremos en este mundo y nos encontramos a una empresa mucho más preocupada en recaudar dinero que en la propia formación y cuidado de los niños y niñas que participan en la actividad.
ResponderEliminar¡Increíble!
Vaya, qué vergüenza, espero que puedas solucionar algo y que tu hijo no haya perdido la ilusión de salir fuera. Al menos que la empresa EF responda y reformule su forma de trabajar.
ResponderEliminarPara mi hijo, es el momento de recordar "los buenos momentos" y tratar de olvidar la tensión padecida; en eso estamos. En realidad el primer objetivo era que cogiese el gusto por estas experiencias... ¡Muchas Gracias!
EliminarSin duda ninguna, lo que debería haber sido una experiencia agradable y fructífera, se ha convertido en algo para olvidar, debido a la incompetencia e inoperancia de la empresa; así como de su animo de lucro desmedido. Una pena.
ResponderEliminar¡Qué pena, con la ilusión que tenías de enviar a tu hijo a este viaje! No entiendo cómo te ha podido pasar ésto, llevas años gestionando los Erasmus y nunca había salido nada tan mal. El que me organizaste a mí con "English Matters" fue una delicia, fantástico, mejoré muchísimo mi inglés y tuve una experiencia inolvidable. Todavía conservo contacto con gente que conocí en ese viaje.
ResponderEliminarPues sí, English Matters siempre dio un buen servicio, y en precio es mucho más competitiva que EF; lo que pasa es que aunque también tiene cosas para adolescentes, está más indicada para adultos y jóvenes; de todos modos estoy seguro de que nunca se hubiera desentendido de los problemas de esta manera. Gracias, Emilio.
EliminarVaya faena, pero te preocupes; para tu hijo habrá mejores experiencias en un futuro. Ahora lo que debes hacer es reclamar y denunciar estos incumplimientos para que otras personas que piensan enviar a sus hijos tengan toda la información a la hora de escoger.
ResponderEliminar¡Vaya desastre de organización! Ahora lo importante es que el chico no pierda las ganas y se anime a repetir otro año... ¡Con otra empresa, claro!
ResponderEliminarVaya chasco de viaje! En mi opinión, lo peor ha sido lo de dejar a un niño de 14 años sólo mientras los demás van a hacer la actividad. No hubo ningún monitor que le prestase el dinero, suponiendo que hubiese que pagarlo? O que se hubiese quedado algún monitor con él. Inexplicable. Como profesora, jamás se me ocurriría hacer algo así en una excursión.
ResponderEliminarImperdonable. No se puede planificar una estancia de 3 semanas para viajar en autobús de 4 a 8 horas al día, y menos con adolescentes. EF se lo tendría que hacer mirar, que además es de las más caras.
ResponderEliminarBueno, ya han contestado. Por supuesto no reconocen nada, dicen que lo hicieron todo bien y que mi reclamación no tiene fundamento, y eso sí; parece que les ha molestado esta entrada del Blog y piden que la retire o en caso contrario "acometeremos las acciones necesarias en defensa de los intereses de EF EDUCACIÓN".
ResponderEliminarPor mi parte, además de mantener el blog en el que simplemente relato hechos que puedo demostrar, seguiré con la reclamación en consumo.
Seguiré informando...
Verdaderamente decepcionante por parte de EF, aunque de lo contado hasta ahora, la verdad, es lo esperado. No te desanimes y reclama, no sólo porque sea tu derecho, sino también porque esta conducta no puede quedar impune. GRACIAS POR COMPARTIR CON NOSOTROS TU EXPERIENCIA.
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